
Recuerdo cuando me dibujaste con cara de mono, y tu excusa fue que me había movido mucho; me echabas la culpa a mí, pero yo sabía que lo que pretendías era mejorar tu técnica de dibujo.
Otra cosa que recuerdo era cuando escuchabas música y me decías que te acompañara. Cuando te compraste el CD de "Iron Maiden", lo escuchábamos en el living a todo volumen, y mi Madre nos venía a acompañar hasta que llegaba alguien.
Además recuerdo cuando te molestaba a ti cada vez que traías a tu polola. Era una bella persona por dentro y por fuera, tal vez por eso eligó la carrera que eligió: educadora de párvulos. Se casaron y tuviste un hijo a quien llamaste "Lucas" como tu ¿primo o sobrino?, -no recuerdo que parentesco tenía contigo exactamente.
Aunque era el hijo de la nana, tú, tus dos hermanos y hasta tu propia Madre, incluso tu familia, me trataban como si fuera de su propia familia, me llevaban a veranear a Panguipulli, donde jugaba con tus primos que eran de mi edad, o con tus amigos y familia, al domino, monopolio, juegos de cartas, o para ser más específico juegos de mesa o, a veces, practicábamos algún deporte en las canchas de tierra.
Aunque no lo creas, eres como un hermano, y tu forma de ser, de no menospreciar a nadie sin saber qué pasó, o descubrir la verdad, cuando piensas en algo, no hay nadie quien te detenga, y si te equivocas, aprendes y lo asumes. Siempre diciendo lo que querías, lo lograbas.
Algún día quisiera volver a encontrarme contigo, ver cómo estás tú y tu familia, ya que eres un hermano para mí, ya que tú y tu familia me enseñaron mucho, y no me trataban como un niño: me enseñaste que podía aprender y asumir mis propios errores.
Tal vez la frase: "Un hermano puede no ser un amigo, pero un amigo será siempre un hermano", sea verdad. Tú no eres mi hermano biológico, sino un gran amigo que me enseñó tanto, igual que tu familia.
GRACIAS!!!